Leyendas y curiosidades de Aldeanueva de la Vera

Si eres un viajero que busca alejarse del ajetreo de la ciudad y disfrutar de la tranquilidad del turismo rural, nuestro apartamento turístico es ideal para lograrlo. Aldeanueva es un lugar tranquilo, y en la Comarca de la Vera tienes todo lo que necesitas para vivir la naturaleza, la historia y el descanso en estado puro.

Además, en nuestro blog te iremos dando ideas para recorrer toda la comarca, así como consejos y curiosidades. En este artículo nos vamos a centrar en esto último, y te vamos a hablar de algunas leyendas y detalles curiosos de Aldeanueva.

¿Por qué nos llaman “pencones”?

Aunque el gentilicio oficial que tenemos es aldeanovenses, a los vecinos de Aldeanueva se nos conoce como “pencones”. Y estamos encantados de que nos llamen así porque tiene una historia que se remonta a la época de Carlos V. Cuando el emperador iba de camino a su retiro en el monasterio de Yuste, unos vecinos de Aldeanueva se ofrecieron para cargar con él hasta Cuacos porque debido a su gota no podía apenas caminar.

El viaje le fue muy agradable al monarca, y quiso agradecer su labor con un generoso pago. Sin embargo, ellos lo rechazaron porque consideraban un gran honor haber cargado sobre sus hombros a tan ilustre personaje. Carlos V insistió tanto, que al final dijeron que un penco de vino era suficiente. Esto le pareció tan gracioso que, además de darles lo que pidieron, los empezó a llamar “pencones” o “los del penco”, y el nombre se extendió a todos los habitantes de la localidad hasta nuestros días.

El litigio por una Ermita

Este episodio de Aldeanueva es compartido por la localidad de Cuacos de Yuste, con la que hace frontera, y se remonta a la época en la que la Ermita de San Gil estaba en pie. Hoy no existe, y donde estuvo solo se conservan algunas piedras, aunque merece la pena visitar la zona.

La historia en cuestión habla de un conflicto que hubo entre los habitantes de Aldeanueva y los de Cuacos, porque ambas localidades asegurábamos que la ermita estaba en el límite de nuestra localidad. El caso es que la ermita estaba justo en medio, y la leyenda cuenta que en Aldeanueva nos acabamos quedando con el terreno, mientras que la imagen de San Gil, que se conserva hoy en la iglesia parroquial de Cuacos. La verdad es que no sabemos cuánto de esta historia es real y qué detalles son solo una leyenda.

La talla del Cristo del Sepulcro

Otra leyenda que tiene que ver con la religión es la del Cristo del Sepulcro, que se encuentra en la iglesia de San Pedro y que comentamos brevemente en un artículo anterior
Se dice que el artesano que hizo la imagen estaba buscando una madera de calidad, y que vio un naranjo que le pareció adecuado, pero el dueño no se lo quiso vender porque daba unas naranjas espectaculares. Pero al día siguiente el árbol estaba seco, y el dueño accedió a venderlo al escultor.

Desde entonces, la imagen ha sido objeto de historias de milagros. Incluso se dice que nada más cortar el árbol, una mujer se sentó un rato a descansar sobre el tronco, y cuando se levantó se había curado de una enfermedad que tenía.
Estas son las leyendas y curiosidades más famosas de Aldeanueva, aunque no son las únicas. Ven y descubre muchas otras que te contarán los vecinos de la localidad.